
El cuidado de la piel y, en especial, de los pies, debe ser parte fundamental en el control de la diabetes. El aumento del azúcar en la sangre puede ocasionar cambios en la piel creando cierta predisposición a infecciones, dificultad en la cicatrización de heridas, resequedad, problemas de circulación en las extremidades inferiores e incluso pérdida de sensibilidad en las piernas y pies, entre otros.
¿Qué puede encontrar en ésta guía?
- Cuidado de la piel
- Revisión e higiene de los pies
- Uso del calzado
- Entre otros temas